El posicionamiento SEO fue, en una época no tan lejana, una de las principales y más importantes estrategias de marketing digital aplicada por parte de marcas y empresas. Sin embargo, la llegada de las redes sociales le quitó cierto protagonismo a esta herramienta y hasta parecía que la había destinado a morir… parecía, decimos, porque ahora la cosa no está tan clara.
Y es que resultó que las redes sociales dejaron de ser la fuente de tráfico que las compañías soñaban, pues este factor cayó estrepitosamente al mismo tiempo que los encargados de manejar esas plataformas (sobre todo Facebook) fueron cambiando hasta el punto de obligar a las empresas a invertir más de lo esperado.
¿Y cuál ha sido la reacción de marcas y empresas ante este escenario? ¡Apostar de nuevo por las estrategias de posicionamiento SEO! Eso, porque los motores de búsqueda no solo no dejaron de usarse nunca, sino que se han visto beneficiados por algunos de los movimientos de la industria y por el boom de los smartphones, los cuales permiten que los usuarios hagan mucho más searching a través de sus móviles.
El efecto Amazon
Esta tendencia es tan cierta que estudios recientes demuestran que las empresas están destinando más dinero al posicionamiento SEO gracias, entre otros factores, al interés que ha despertado Amazon. Explicamos: cada vez de forma más frecuente las marcas están invirtiendo en publicidad en este gigante del internet, generando un efecto muy positivo sobre cómo se percibe el marketing relacionado con las búsquedas.
Ese efecto, cíclico por cierto, tiene que ver con el renovado interés de los responsables de marketing por el SEO, las búsquedas y la publicidad relacionada con ello. Amazon, lo dicho, se ha convertido en un auténtico motor de búsqueda de productos para los consumidores, lo que hace que marcas y empresas traten de posicionarse allí de la mejor manera posible, lo cual solo se logra con mayor utilización de tan importante herramienta de mercadeo digital.
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