El competitivo mercado de los smartphones es uno que últimamente no le está haciendo mucha gracia que se diga a la gente de HTC, ni le está generando dividendos: ¡La firma taiwanesa está en serios aprietos económicos! Sin ir más lejos, en el recién culminado mes de agosto mostró sus peores resultados financieros en más de una década. Eso es grave y buscan solución.
¿Qué tienen planificado? Según reportes de medios asiáticos especializados, vender su unidad de telefonía móvil. Así de simple. Y no a cualquier postor por cierto, sino a la mismísima Google, empresa con la que tiene un largo historial colaborativo gracias a la fabricación de los populares Pixel.
Los rumores apuntan a que en HTC quieren cortar el problema de raíz y que en Google se han mostrado de lo más interesados en hacer arte y parte. Por supuesto, el gigante estadounidense se involucraría de dos maneras posibles nada más: la primera, convirtiéndose solo en socio estratégico, y la segunda, comprando la totalidad de la unidad de dispositivos móviles.
La única duda, claro, es que Google no tiene buenas experiencias en aquello de comprar fabricantes de móviles. Allí está el (mal) ejemplo de Motorola, adquisición que no rindió ningún tipo de frutos y terminó pasando a manos de otros dueños como si de un estorbo se tratase.
¿Qué le pasará a HTC como empresa si termina vendiendo su unidad de telefonía móvil? Nada muy impresionante. La firma seguiría con el resto de sus otras unidades de desarrollo y se enfocaría en la Realidad Virtual, negocio en el que le está yendo lo más que bien con las HTC Vine.
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